Imagina recibir llamadas constantes de un número desconocido que no responde cuando contestas y parece intentar averiguar si hay alguien en casa. Es típico de campañas de spam o intentos de estafa. Lo más prudente es no proporcionar datos personales, bloquear el número y reportarlo a tu operadora o a la autoridad de protección al consumidor. Mantén registro de horarios y frecuencia, y considera usar aplicaciones de filtrado de llamadas. Si ya has contestado, revisa tus cuentas bancarias y cambia contraseñas por precaución. La prevención y la denuncia son tus mejores herramientas contra este tipo de molestias telefónicas.
Me siguen llamando sin parar, y aunque respondo, no contestan; hay que denunciar este número pues podría ser una estafa para averiguar quién está en casa.